El peligro de consumir tabaco

El tabaquismo continúa siendo una de las principales amenazas para la salud pública a nivel mundial. Se estima que cada año mueren más de 8 millones de personas debido al consumo de tabaco, cifra que incluye a fumadores activos y pasivos.

En Chile, la situación también es preocupante. Según la última encuesta nacional de consumo de drogas en la población general, más del 40% de los chilenos mayores de 15 años han probado el tabaco alguna vez en su vida. Además, alrededor del 25% de la población adulta sigue fumando habitualmente.

El consumo de tabaco está asociado a numerosas enfermedades graves, como enfermedades cardiovasculares, cáncer de pulmón, enfermedad pulmonar obstructiva crónica (EPOC), enfermedades respiratorias, entre otras. Estas enfermedades no solo causan un enorme sufrimiento humano, sino que también generan una gran carga económica para los sistemas de salud.

Además de los riesgos para los fumadores, la exposición al humo de tabaco ambiental aumenta el riesgo de enfermedades cardiovasculares y respiratorias en personas no fumadoras.

Ante esta situación, es crucial promover medidas efectivas para prevenir y reducir el consumo de tabaco. Estas incluyen políticas de control del tabaco, aumentar los impuestos sobre los productos de tabaco, implementar espacios libres de humo, brindar acceso a programas de tratamiento y apoyo para dejar de fumar, y realizar campañas educativas que informen sobre los riesgos asociados al consumo de tabaco.

El aporte de nuestro Instituto

Dra. Guacolda Benavides.

El INT fue el primer hospital público en desarrollar un Programa de Cesación del Tabaquismo, el cual funciona hace más de 20 años: “El tratamiento contempla sesiones de trabajo grupal, en las que los participantes reciben educación y herramientas de apoyo farmacológico de parte de un equipo conformado por médico, psicólogo y enfermera”, explicó la broncopulmonar, Guacolda Benavides.

Por su parte, la psicóloga del programa, Haydee Chamorro, señaló que es posible dejar de fumar: Hay que aprender las estrategias para manejar las ganas de fumar y darse cuenta de cómo cada uno puede ir haciendo cambios concretos para ello. Nosotros trabajamos las conductas, las emociones, la autoestima y la autoeficacia de cada uno de los pacientes”.

Si quieres ser parte de este programa, debes acercarte al Cesfam que te corresponda y desde ahí puedes ser derivado para evaluación en nuestro instituto.