Estrategias de tratamiento para mejorar la salud mental en los adultos mayores

 

La OMS aseguró que «las personas de 60 años de edad o mayores realizan aportaciones valiosas a la sociedad como miembros activos de la familia, voluntarios y participantes activos en la fuerza de trabajo».

Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), la población del planeta está envejeciendo rápidamente, para el 2050 las personas mayores de 60 pasarán de ser del 12 al 22% a nivel mundial.

El organismo afirmó en un comunicado oficial que «las personas de 60 años de edad o mayores realizan aportaciones valiosas a la sociedad como miembros activos de la familia, voluntarios y participantes activos en la fuerza de trabajo» agregando que «el aumento previsto es de 900 millones a 2 000 millones de personas mayores de 60 años. Los adultos mayores pueden sufrir problemas físicos y mentales que es preciso reconocer».

La salud mental es importante para las personas de la tercera edad y la enfermedad mental más común en este grupo es la depresión, sin embargo «es frecuente que los síntomas de este trastorno en los adultos mayores se pasen por alto y no se traten porque coinciden con otros problemas que experimentan», aseguró la OMS.

Este enfermedad se puede prevenir y mejor mediante la promoción de hábitos saludables, creando condiciones de vida y un entorno agradable, que acreciente el bienestar y la vida sana. Acá algunos consejos:

  1. Una buena y correcta habitación.
  2. Programas sanitarios y sociales dirigidos específicamente a grupos vulnerables como las personas que viven solas y las que habitan en el medio rural o las aquejadas de enfermedades mentales o somáticas.
  3. Programas para prevenir y abordar el maltrato de los adultos mayores.
  4. Optimización de la salud física y psíquica.
  5. Suministro de información y apoyo.

La OMS también establece como compromiso de los estados miembros que:

  1. Reforzar un liderazgo y una gobernanza eficaces en el ámbito de la salud mental.
  2. Proporcionar en el ámbito comunitario servicios de asistencia social y de salud mental completos, integrados y con capacidad de respuesta.
  3. Poner en práctica estrategias de promoción y prevención en el campo de la salud mental.
  4. Fortalecer los sistemas de información, los datos científicos y las investigaciones sobre la salud mental.